Apenas se informó que el municipio de San Isidro continuará con el Plan Costero para abrir la ribera al público, se realizó la entrega a la administración local del restaurante Barisidro, ubicado en Roque Sáenz Peña 1602, cuyo contrato fue rescindido luego de casi 30 años de uso. La primera instalación demolida fue en junio, cuando derribaron Catalejo, otro clásico bar de la zona que funcionaba con un contrato de uso precario y sin pagar ningún canon.
La superficie donde está ubicado tiene 9.775 metros cuadrados y será transformada en un espacio parquizado para “garantizar el acceso público y gratuito”, de acuerdo a lo detallado desde el municipio en diálogo con LA NACION. Ambos, tanto este establecimiento como el anterior, funcionaban en tierras provinciales desde 1996 y durante casi 29 años no pagaron ningún tipo de tarifa por el uso del terreno ni los impuestos municipales correspondientes.
La actual gestión municipal señaló que la zona costera estuvo tiempo en “profundo abandono y desidia”. Afirmaron que muchos locales funcionaban en condiciones “precarias y hasta peligrosas” para quienes los visitaban, y atribuyeron esta situación a la tolerancia y complicidad del gobierno anterior, encabezado por el exintendente Gustavo Posse.
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Al contrato original establecía que el uso de los terrenos era provisional hasta definir su “destino final”, dejando abierta la posibilidad de futuros cambios en el uso del espacio. La firma del convenio con Catalejo en junio permitió la entrega del espacio, que ya fue demolido y comenzó a transformarse en un parque público. Por su parte, el acuerdo con Barisidro exige la “entrega ordenada del predio”, marcando el próximo paso para continuar con la renovación de la costa.
Devolvieron el local el viernes pasado en condiciones desordenadas: techos, ventanales y galerías estaban destruidos, según mostraron fotos oficiales. La intendencia de Ramón Lanús confirmaron que están evaluando “acciones judiciales para proteger el patrimonio municipal”.
Así es el plan para recuperar la costa de San Isidro
A través de un plan integral de recuperación costera, la municipalidad busca recuperar el acceso público al río para todos los vecinos. El primer paso se dio en octubre de 2024, cuando se canceló un proyecto para construir un barrio cerrado de condominios en Sebastián Elcano y Alvear, una zona junto al río que estaba destinada a uso público.
En este predio funcionaban dos bares que fueron demolidos en 2023, y se sumó además la puesta en valor del Parque 33 Orientales, donde se incorporaron zonas recreativas, áreas de descanso y se restauró un monumento.
La municipalidad también había dado marcha atrás con la autorización para construir un barrio cerrado en el bajo de Martínez, sobre la calle Alvear, justo frente al río. Desde la actual gestión remarcan: «Venimos de años y años de permisos precarios y manejos informales, donde claramente se desdibujó el límite entre lo privado y lo público«.
A día de hoy, “si no sos socio de un club, no tenés acceso público a la costa ni espacios abiertos para todos. Nosotros venimos a cambiar eso. Vamos a recuperar ocho hectáreas que hoy están ocupadas o con acceso restringido para transformarlas en un paseo costero”, afirmaron desde el Municipio. La finalidad es regularizar la situación y establecer un marco claro para el uso y la protección del espacio ribereño, garantizando el derecho de todos.
De esta manera, el equipo municipal está revisando todas las parcelas públicas ocupadas, analizando qué normativa vigente las rige y qué tipo de uso corresponde en cada caso. Al momento, se concentran especialmente en la zona de Alvear y el río, donde varias áreas no tienen permisos vigentes y se busca liberarlas para el uso público.
Por otro lado, el municipio lanzará un plan de participación ciudadana para incluir la mirada de los vecinos. Así, entre julio y septiembre, harán:
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Recorridas por las áreas públicas para dialogar con quienes las usan,
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Encuestas puerta a puerta en el Bajo de San Isidro,
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Y una encuesta general online a través de las redes del municipio.
Luego, organizarán encuentros grupales para analizar los resultados y planificar los próximos pasos del proyecto.
MV / Gi