Este miércoles comienza el juicio contra Esteban Rojas Almada (45), el prestamista acusado de haber asesinado de un tiro a su novia Ferni Ayala (28) en febrero de 2023, en la casa que compartían en la Villa 21-24, en el barrio porteño de Barracas.
El juicio se realizará los días miércoles 23 y 30 de octubre, con audiencias que comenzarán a las 9.30 en el TOC N° 17, ubicado en Lavalle 1171, Ciudad Autónoma de Buenos Aires.
«Para estos días la familia pide apoyo de las organizaciones sociales y de la ciudadanía para que acompañen con su presencia. Es clave que se escuche en la calle el pedido de justicia por Ferni«, señaló una fuente cercana al entorno de la víctima.
«La familia sufre y sufrió constantes intimidaciones por parte del entorno del femicida, con el objetivo de desgastarla, que dejen de luchar y garantizarle impunidad. Pero lo cierto es que a pesar del dolor, en ningún momento bajaron los brazos», agregó la fuente.
Una de las amenazas recibidas por la familia, según publicó el sitio Conexión Ciudad, ocurrió el 22 de mayo de 2023. Ese día, Mariano, uno de los hermanos del presunto homicida, fue sorprendido por Clara, hermana de la chica asesinada, mientras prendía fuego unos carteles que la familia había pegado en los pasillos de su barrio por el femicidio de Ferni: cuando Clara le preguntó qué estaba haciendo, el hombre la amenazó con “prenderla fuego”.
Femicidio de Ferni Ayala
El juez nacional en lo Criminal y Correccional 16 que dictó el procesamiento de Rojas Almada, Mariano Iturralde, dio por acreditado que el imputado asesinó a su novia Ferni Cristina Ayala Palacios «mediante el empleo de un arma de fuego calibre 9» entre las 7.44 y las 9.15 del 19 de febrero de 2023, en el interior de la vivienda donde la pareja convivía en el barrio 21-24 Zavaleta, en Barracas. Según la investigación, «la damnificada habría intentado repeler una agresión física» por parte de su pareja, lo que le dejó lesiones en el cuerpo.
De acuerdo a los registros fílmicos, la víctima y el victimario arribaron a su casa a las 7.41 de ese día luego de haber asistido a dos locales bailables del barrio de Constitución. En el primero, «Radio Estudio», ubicado en la calle O’Brien 1232, la pareja estuvo entre la 1.30 y las 3.30 de la madrugada. De allí se fueron al segundo, «La Sirenita», ubicado a 150 metros, sobre la calle Santiago del Estero 1748.
En este útimo boliche, según reconstruyó el juez, «Esteban Rojas Almada habría mantenido una discusión con Christian Manuel Duré Irala (amigo de la damnificada) para luego generarse un breve diálogo entre el imputado con Ferni Ayala Palacios, que provocó que esta última se pusiera nerviosa y comenzara a llorar».
La familia de la víctima contó a la prensa y a los investigadores que un comentario sobre una expareja de Ferni, realizado esa noche por el amigo de la víctima y que enfureció a Rojas Almada, pudo ser el móvil del femicidio.
La última vez que los allegados de la víctima la vieron con vida fue a las 6 de la madrugada en ese local bailable.
El crimen se descubrió recién al otro día, en la madrugada del 20 de febrero, cuando preocupadas por no saber nada de ella, dos de las hermanas de Ferni derribaron la puerta del departamento donde ella vivía con ayuda de un vecino y hallaron el cadáver.
Fuga y captura en Paraguay
Los investigadores policiales y el fiscal Pablo Recchini identificaron de inmediato al prestamista Rojas Almada como principal sospechoso del femicidio y se dictó su captura. Sin embargo, como el cadáver de Ferni se descubrió casi 24 horas después del crimen, el hombre tuvo tiempo de escapar y se transformó en uno de los prófugos más buscados por la justicia argentina, hasta que a partir de datos aportados por el Departamento de Inteligencia Contra el Crimen Organizado de la Policía Federal a Interpol Paraguay, el hombre pudo ser detenido el 11 de julio último en la ciudad paraguaya de Mariano Roque Alonso.
El 25 de noviembre llegó extraditado desde Asunción y, tras negarse a declarar, quedó procesado por «homicidio agravado por mediar violencia de género (femicidio) y por el uso de arma de fuego» y la «tenencia y la portación ilegal de un arma de guerra», delitos que prevén una pena de prisión perpetua.
El prestamista tiene como antecedente una condena de 2013 a 4 años de prisión por “lesiones graves” por haber efectuado en CABA al menos diez disparos con una pistola a un hombre, por la espalda, mientras caminaba por la calle junto a una mujer y un menor, que terminó herido en un muslo, una pierna y el abdomen.
«Si no es mía, no será de nadie»
En diciembre de 2023, el juez Iturralde le dictó prisión preventiva al acusado y dijo que el crimen debe ser considerado “típicamente un femicidio, pues basta verificar una relación de dominio y desigualdad que establece el hombre en la pareja en detrimento de la mujer, lo que este Tribunal considera, se ha dado en el caso, siendo el punto cúlmine de dicho sometimiento y cosificación, el dar muerte a la pareja a consecuencia de un episodio de celopatía, dando un claro mensaje de ‘si no es mía, no será de nadie’”.
En su decisión, el magistrado trabó un embargo sobre los bienes del imputado por 100 millones de pesos y ordenó que sea sometido al “examen mental” obligatorio para los acusados de delitos graves como éste, que se pena con prisión perpetua.
En otro punto resolutivo, Iturralde dispuso la extracción “compulsiva” de muestras para obtener el ADN de Rojas Almada y que sea cotejado con una mancha de sangre que fue levantada del borde de la ducha del baño en la escena del crimen y que, según los peritajes, contienen tres perfiles genéticos mezclados: el de la víctima y el de dos aportantes anónimos.
Al momento de justificar la prisión preventiva, Iturralde recordó que existe riesgo de fuga porque el acusado “se mantuvo prófugo de la justicia durante cinco meses” y que también “no puede descartarse la posibilidad de que el nombrado, de ser liberado, incurra en otros actos de entorpecimiento de la investigación y ejerza presión y/o tome represalias” contra la familia de Ferni que actúa como querellante.