La foto no podía ser más simbólica: el presidente de la Nación da un discurso al país denunciando que el Congreso pone en riesgo las finanzas públicas (por votar beneficios a jubilados, personas con discapacidad, universidades o el Garrahan), rodeado de funcionarios provenientes del principal banco de inversión internacional que se ha beneficiado de la política de endeudamiento del país generada por esos mismos funcionarios.
Política que, además, está generando una salida permanente de recursos en pago de intereses de la deuda, que es la verdadera razón de fragilidad y debilidad de las finanzas públicas. Una situación que, paradójicamente, fue denunciada por el mentor de estos funcionarios, el banco J.P. Morgan, poco más de un mes atrás, cuando recomendó retirar los fondos especulativos del país ante el riesgo de devaluación y pérdida de rendimiento de las colocaciones en pesos (salir del carry trade, en otras palabras).
Un mes después, el J.P. Morgan cambió de parecer, pero no en forma gratuita. Lo hizo despúés que la conducción económica habilitó una devaluación del 20 por ciento y subió las tasas de interés al doble (pasaron del 30 al 60 por ciento efectiva anual) de los bonos de la deuda en pesos de corto plazo. Con este cambio de condiciones, lógicamente, el J.P.Morgan «recomendó» volver al carry trade a seguir difrutando de las ganancias especulativas en Argentina.
El ministro de Economía, su vice, el presidente del Banco Central, y su vice, son todos ex ejecutivos del J.P.Morgan. Quizás Luis Caputo, José Luis Daza, Santiago Bausili y Vladimir Werning hayan demostrado capacidad en el desempeño de su tarea en el banco de inversión. Así habrá sido, dicen quienes conocen el funcionamiento de esas organizaciones, ya que su tarea era sometida a un severo control y evaluación de resultados.
Algo que no ocurre en su actual desempeño en la función pública. «Si estando en el J.P. Morgan hubieran hecho este revoleo de contratos de dólar futuro que hicieron ahora, con la pérdida multimillonaria que le va a ocasionar al Banco Central, los echaban al otro día», señaló la misma fuentre del sector financiero.
Pero lo más grave, sin embargo, no es su mucha o poca capacidad profesional. «Lo grave es que, como funcionarios públicos, siguen actuando çon la misma lógica financiera y en beneficio del mismo banco J.P. Morgan», agregó Claudio Lozano, economista y ex director del Banco Nación. «Siguen una lógica de valorización financiera y de endeudamiento del Estado, en la que el J.P.Morgan opera como colocador de títulos de la deuda pública en el mercado a cambio de una costosa comisión, y en captador de los capitales que se benefician de las altas tasas que se pagan con el carry trade «, explicó.
«Hoy son hacedores de política, pero siguen teniendo puesta la camiseta del sector privado», dijo Lozano respecto de estos funcionarios. «Además, tampoco es tan claro si no son ellos mismos beneficiarios de este proceso de transferencia de ingresos al sector financiero, porque los fondos de inversión que se benefician de este proceso de valorización financiera son el mundo al que ellos pertenecían», concluyó.