Boca y la crisis sin fin: se disolvió el Consejo de Fútbol
Raúl Cascini y Mauricio Serna, dos de los más cuestionados por los hinchas, dejaron de cumplir funciones en la institución. El equipo recibirá a Racing el sábado.
Se cumplieron los vaticinios y en plena crisis deportiva de Boca, el presidente Juan Román Riquelme tomó la decisión de disolver el Consejo de Fútbol. De esta manera, Mauricio Serna y Raúl Cascini dejarán sus puestos y se irán del club en tanto que el único que seguirá es Marcelo Delgado, acaso el más cercano de los tres al actual presidente, quien concentrará más funciones.
Desde Boca comunicaron que Riquelme primero les ofreció a Serna y Cascini reacomodarlos en otro sector de la institución, aunque luego dió marcha atrás y directamente los destituyó del cargo. Según indicaron fuentes de la institución. la medida se fundamentó en que “no se dieron los resultados que esperábamos y hay que cambiar”. Por lo que después de más de cinco años encargándose de la gestión futbolística de Boca, el Consejo de Fútbol cesó en sus funciones.
A partir de ahora comienzan las especulaciones respecto de como habrá de manejarse de aquí en mas la política de altas y bajas del plantel y la relación con los jugadores, que bajo el Consejo ahora saliente siempre se desarrolló en un marco de tensión. Según algunos observadores, Riquelme derivará todas esas cuestiones en un manager, pero reservándose siempre la última palabra en todos los temas. Otros creen que podría armarse un nuevo Consejo con otros ex futbolistas de probada identidad boquense. En ambos casos, circulan dos nombres posibles, los de Carlos Navarro Montoya y Alberto Márcico.
Las reacciones de la Bombonera antes, durante y después del partido del sábado ante Racing pueden marcar el camino de lo que se viene en el futuro futbolístico de Boca. Con la disolución del Consejo, Riquelme acusa recibo del mal momento deportivo y trata de descomprimir y crear una expectativa nueva en los hinchas. Pero de nada servirá esta medida si Boca no le gana a la Academia y sigue extendiendo su racha de once partidos sin victorias entre el torneo Apertura, el Mundial de Clubes, la Copa Argentina y el torneo Clausura.
El Consejo de Fútbol, formado cuando Riquelme asumió la vicepresidencia en 2020, también estuvo integrado desde un principio por el colombiano Jorge Bermúdez quien se retiró cuando Román llegó a presidencia a fines de 2023. La gestión de Cascini, Serna y Delgado había quedado en la mira desde fines de ese año cuando Boca no pudo entrar a la Copa Libertadores 2024 y no pudo remontar luego por las sucesivas eliminaciones que el equipo fue sufriendo.
Sin ir más lejos, este año quedó al margen de ambas copas continentales al perder ante Alianza Lima por tiros desde el punto penal en la Bombonera, luego y también como local, Independiente lo eliminó en los cuartos de final del torneo Apertura, no pudo pasar de la fase de grupos del Mundial de Clubes en el que sumó apenas dos puntos sobre nueve y por último, Atlético Tucumán lo sacó de la Copa Argentina.
La actual mala racha, además, compromete la entrada a la Copa Libertadores 2026 para la que necesita salir campeón del torneo Claustra o clasificar entre los tres primeros de la tabla anual en la que, por ahora y por diferencia de gol, ocupa el cuarto puesto que lo lleva de nuevo a la Copa Sudamericana. Pero además, el desgaste del Consejo sobrevino por otros temas como la contratación de jugadores poco calificados para integrar el plantel, una relación tirante con algunos futbolistas, la salida de Valentín Barco, Ezequiel y Guillermo Fernández y Cristian Medina quienes no quisieron renovar sus contratos y se terminaron yendo por la cláusula de rescisión y yerros administrativos, Ahora y en medio de una crisis que no encuentra su piso, el Consejo deja de existir. Habrá que ver que se le ocurre a Riquelme en su reemplazo.