El Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires desató este martes una fuerte polémica en Saavedra tras desalojar y demoler un espacio que funcionaba como centro de jubilados en Parque Saavedra, al considerarlo una ocupación irregular. El operativo se realizó temprano por la mañana sobre avenida García del Río, entre Conde y Ramón Freire, y estuvo coordinado por el Ministerio de Espacio Público e Higiene Urbana con apoyo de la Policía de la Ciudad.
Según informaron fuentes oficiales, el lugar consistía en una casilla de mampostería con cancha de bochas que se presentaba públicamente como “Centro de Jubilados”, pero carecía de habilitación. “Era solo una fachada”, aseguraron voceros porteños en off, y agregaron que el espacio era utilizado también por simpatizantes de Platense en días de partido, además de ofrecer clases de boxeo y otros deportes sin permiso ni habilitación del GCBA.
Desde el Gobierno sostienen que el lugar había generado múltiples denuncias vecinales por peleas, amenazas y episodios de violencia. “Intentaron varias veces comenzar obras sin permiso. En octubre de 2024 fueron intimados a presentar la documentación correspondiente y se les secuestraron materiales de obra”, detallaron los voceros.
Además, en la administración porteña señalaron que desde la cuenta de Instagram del centro publicaban contenidos de corte político, incluyendo mensajes pro Palestina y cuestionamientos al Gobierno nacional. En el lugar fueron encontradas facas que serían utilizadas por un sector de la barra del club de fútbol barrial.
Durante el procedimiento, se desalojó a las personas que se encontraban en el lugar y se demolió la construcción con maquinaria especializada, retirando siete camiones cargados de escombros. “La convivencia requiere reglas claras y respeto. No vamos a permitir más ocupaciones permanentes que obliguen a los vecinos a vivir situaciones que no eligieron. El espacio público es de todos, tiene que ser compartido, no tomado”, declaró el ministro de Espacio Público e Higiene Urbana, Ignacio Baistrocchi.
Sin embargo, el cierre generó fuerte malestar entre jubilados y vecinos que utilizaban el espacio como punto de encuentro y recreación. Algunos denunciaron que el operativo se realizó sin aviso previo y durante la madrugada, dejando sin lugar a adultos mayores que se reunían allí semanalmente.
por R.N.