El mercado financiero se encuentra revolucionado y ante mucha volatilidad, sobre todo ante la toma de cobertura por la que optaron varios inversionistas, además del final del carry trade que se está aproximando. Es por eso que para analizar este tema en profundidad, este medio se puso en comunicación con el operador de corredores de cambio, Gustavo Quintana.
«Muchos inversores abandonaron el carry trade y se dolarizaron de manera desordenada y hasta histérica«, afirmó Gustavo Quintana. Luego, criticó que, «se pagaron precios irracionales en el corto plazo» y señaló que, «quienes tomaron posiciones apresuradas ahora asumen fuertes pérdidas«.
Sobre la posible intervención del Gobierno, Quinta descartó esa hipótesis: «Según comunicados oficiales, el Banco Central no intervino en el mercado de futuros«. Luego, manifestó que, «la corrección del dólar futuro se debió a la aprobación del DNU en el Congreso, que generó cierta distensión».
Se aproxima el final del carry trade ante la incertidumbre en la política cambiaria
El entrevistado advirtió que, «algunos inversores están desarmando posiciones en pesos por temor a cambios en la política cambiaria«. Sin embargo, remarcó que, «en el cortísimo plazo no habrá modificaciones» y que «las autoridades económicas mantendrán su estrategia hasta la reunión del FMI a fines de abril«.
Sobre si la incertidumbre podría retrasar la liquidación de exportaciones, Quintana señaló que, «las grandes compañías tienen compromisos de venta y deben ingresar divisas en plazos cortos«. También destacó que, «el ingreso de camiones a los puertos ha sido récord en los últimos días» y prevé «un aumento en el flujo de dólares hacia el Banco Central en las próximas semanas».
¿Se viene un esquema de bandas cambiarias?
El operador de corredores de cambio consideró que, «las bandas de flotación podrían ser una condición del FMI«. Sin embargo, advirtió que, «su éxito dependerá del contexto macroeconómico«. A su vez, resaltó que, «si se mantiene la reducción del déficit y la baja de la inflación, no habría inconveniente, pero si no hay orden fiscal, el sistema colapsará«.