Horas después de ser imputado en la causa que investiga el escándalo de los seguros que reveló Clarín este domingo, Alberto Fernández salió este jueves a defenderse.
«Yo no he robado nada y no he participado de ningún negociado ni autorizando ningún negociado. Y esto no es un negociado», dijo el expresidente sobre la trama de intermediarios -entre ellos Héctor Martínez Sosa, su amigo y esposo de su secretaria histórica- que cobraron comisiones millonarias en pólizas de vida de organismos oficiales
Fernández aceptó la imputación del fiscal Ramiro González. «Me parece razonable, el concepto imputación es que se investigue», explicó como si fuera una de sus clases de Derecho. Pero volvió a lanzar una de las valoraciones personales que se le han vuelto slogan. «Yo hago de la honestidad un culto. Sé que soy un hombre público y estoy hablando para explicarle a la gente», dijo Fernández, en diálogo con radio La Red.
El expresidente suele ufanarse de -hasta ahora- no haber sido involucrado en causas de corrupción, una diferenciación que ha repercutido como un intento de contrastarse con Cristina Kirchner.
«Están afectando a mucha gente de bien«, aclaró sobre los nombres que surgieron como beneficiados. Martínez Sosa, el marido de su secretaria María Cantero, por caso, habría gestionado pólizas de ANSeS ante Nación Seguros por más de 20 mil millones de pesos.
«No me pregunten por Martínez Sosa porque jamás en mi vida con él hablé del tema de sus seguros», respondió el expresidente sobre el broker que, se supo, lo visitó en la Quinta de Olivos y con quien compartió festejos.
«Él me conoce, sabe que si me hubiera pedido una cosa así le digo ‘Héctor esto no me lo podés pedir y listo'», agregó. Este miércoles, no había sido tan tajante en esa defensa con su secretaria, la esposa de Martínez Sosa.
El expresidente, quien se encuentra en Buenos Aires luego de una estadía de dos meses en España, donde actualmente residen su esposa e hijo menor, dijo que él no se llevó «ni una goma de borrar del Estado» cuando dejó el cargo.
«Entren y miren en mi Declaración Jurada si ha cambiado algo desde el día que fui presidente, busquen entre mi familia si alguno se enriqueció o si hay un testaferro que tengo que se ha beneficiado. Yo no hago esas cosas», insistió.
Qué explicación dio Alberto Fernández sobre la contratación de seguros en la ANSES
En tanto, Fernández brindó su explicación sobre la contratación de seguros de vida por parte de la ANSeS a Nación Seguros.
Recordó que en Argentina, como en el resto del mundo, cuando uno saca un crédito figuran como gastos administrativos la contratación de un seguro de vida. “Siempre los bancos o todo el que otorga un crédito saca un seguro de vida por las dudas que el que tomó el crédito se muera y lo deje impago. Ese riesgo lo toma una aseguradora y el banco no lo tiene. El banco se garantiza cobrar siempre, aun si el deudor se muere”, relató.
“El ANSeS – continuó – da créditos a jubilados, a gente con AUH, desde 2012. Siempre lo aseguró Nación Seguros. En el 2018 Nación Seguros dice haber perdido mucho dinero, con razón, con estos seguros y por lo tanto no quería seguir asegurándolos”, detalló.
En ese sentido, recordó que ese año y luego de que la empresa aseguradora del Banco Nación rechazara continuar otorgándole seguros al organismo, ANSES pasó a “autoasegurarse”. “Le generó al ANSeS enormes problemas porque no está preparado para eso. Tuvo reclamos de la Auditoría para que deje de asegurar los créditos que estaba dando”, indicó.
Por este motivo, argumentó, en 2021 firmó un decreto “para terminar con el negocio de los seguros en el Estado”. “Y digo en esa norma que todos los bienes y riesgos del Estado se aseguran con Nación Seguros y que esto se hace en forma directa, sin intermediarios”, afirmó. Una narrativa diametralmente contraria, porque la aseguradora del banco públicó buscó a gestores que cobraron comisiones de hasta un 17%.
Fernández siguió su narrativa de lo que pretendió hacer con el cuestionado decreto que emitió en pandemia. “De este modo, ¿con qué terminé? Con el negocito que podían hacer algunos. Yo a usted lo nombraba director de una repartición y usted podía llamar a un productor de seguros y arreglar que le asegurara todos los bienes de esa repartición. De este modo eso se terminó; todos están obligados a pagarle al Estado la prima de seguro y que no haya intermediación”, dijo como explicación.
Aclaró que el decreto firmado por él “pasó por todos lados, por Superintendencia de Seguros, Superintendencia de Riesgo de Trabajo, por el Ministerio de Economía, por la Secretaría de Presupuesto, por la Secretaría de Legal y Técnica”. “No fue un invento mío entre gallos y medianoche”, insistió, sumando rulos burocráticos.
DS