La industria de la soja tuvo su menor nivel de actividad en 13 años y peligran los puestos de trabajo

La molienda de soja en Argentina sigue estancada y sus márgenes continúan siendo negativos. Desde hace 4 meses, la actividad permanece en un volumen promedio de 1,9 millones de toneladas y el uso de la capacidad instalada se mantiene alrededor del 32,5%, según el relevamiento de la Cámara de la Industria Aceitera de la República Argentina y el Centro de Exportadores de Cereales (CIARA-CEC).

La capacidad ociosa de la principal industria del país llega ahora a 67,7%, cuando en octubre pasado se ubicó en 68,4%. En cambio, durante 2017 la capacidad de uso llegó al 83% y la capacidad ociosa era de apenas del 17%. No obstante, se registró un fuerte incremento del ingreso a los puertos de los camiones de soja y maíz durante enero.

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“La capacidad instalada subió de 31,6% a 32,3%, pero sigue siendo muy bajo y en zona de riesgo para lograr mantener las fuentes laborales”, advirtió la entidad, que representa un 48% de las exportaciones del sector.

La molienda de soja fue así la peor de los últimos 13 años, con 27,120 millones de toneladas procesadas en el período de enero a diciembre de 2023.

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Esta es la marca más baja desde 2011 y significa una caída de 11,339 millones de toneladas respecto de igual período del 2022, cuando se procesaron 38,459 millones de toneladas de la oleaginosa. El ritmo de la molienda se mantuvo así cercano a las 2 millones de toneladas mensuales entre septiembre y noviembre.

Por su parte, los márgenes de la molienda de soja siguen con tendencia negativa, con ligeras mejoras por la caída en el precio de la soja disponible. “Pese a que mejoraron durante el mes de noviembre por la baja registrada en el precio del poroto, continúan con signo negativo”, indicó la industria.

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La situación sostenida en el tiempo pone en peligro a las numerosas fuentes laborales de este relevante sector de la agroindustria nacional que se concentra especialmente en la zona del Gran Rosario.

Por último, cabe señalar que también hubo una sensible baja en la molienda de girasol durante diciembre con solo 218.000 toneladas, cuando en noviembre se habían procesado 231.000 toneladas y el acumulado del año pasado llegó al récord de la década con 3,922 millones de toneladas