«La negociación se definirá en el momento crítico», sintetizó un importante diputado de la oposición para describir el estancamiento de la negociación entre el Gobierno y los dialoguistas por la denominada Ley Ómnibus, que fue aprobada en general y que este martes entrará en el debate de la letra chica cuando se retome la sesión que se inició el miércoles pasado.
Mientras Javier Milei llega a Tel Aviv, para iniciar su gira por Israel, que también incluye Roma y el Vaticano, los diputados reiniciarán la sesión que se pasó a cuarto intermedio el viernes, cuando se dio el primer paso hacia la media sanción de la ley, que aún genera incertidumbre sobre su articulado, luego de que el Gobierno bajara el capítulo fiscal y resignara la mitad de las emergencias que había solicitado en el proyecto original que envió en diciembre al Congreso.
Milei avisó que el Gobierno «no va a ceder más nada» y el ministro del Interior, Guillermo Francos, avisó que vetarán cualquier intento de hacer coparticipable el impuesto PAIS.
El cordobés Martín Llaryora presiona para que este gravamen sea coparticipable con las provincias. Por ahora, el grupo de diputados de Córdoba que encabeza Carlos Gutiérrez mantiene condicionado su apoyo a una respuesta favorable del Gobierno al pedido de la provincia de garantizar el flujo a la caja de jubilaciones que no fue transferida a la Nación.
Una de las salidas que se le ofreció desde Hacemos Coalición Federal, el bloque que preside Miguel Angel Pichetto, es apelar al Fondo de Garantía Sustentabilidad para garantizar el financiamiento a las cajas armonizadas. Durante el fin de semana no hubo contactos con Llaryora e incluso desde el Gobierno se mantienen firmes en que no cederán a las presiones de los gobernadores.
Miguel Pichetto y otros diputados del bloque Hacemos Coalición Federal. Foto: Federico Lopez Claro – FTP CLARIN _ABC6062.jpg Z RGonzalez gonzalez«Todo es parte de la negociación», dijo un diputado cordobés al ser consultado sobre la postura que asumieron tanto Milei como Francos. «De algún modo nos tenemos que llevar una solución para la caja de jubilaciones y veremos que nos ofrecen», completó el legislador.
A todo esto, los gobernadores de Juntos por el Cambio vienen manteniendo diálogos subterráneos con el jefe de Gabinete, Nicolás Posse, con el asesor Federico Sturzenegger y el ministro del Interior, Guillermo Francos. Los mandatarios están a la defensiva porque ven a «un gobierno que no genera confianza y que no construye políticamente», apuntó un importante operador describiendo la coincidencia en el análisis que hacen Rogelio Frigerio (Entre Ríos), Ignacio Torres (Chubut) y Leandro Zdero (Chaco).
Aseguran que los gobernadores estaban listos para acompañar la ley, pero después de lo ocurrido en la reunión que se realizó en el Consejo Federal de Inversiones (CFI), hace una semana, cuando Francos abrió la puerta y luego la cerró a la posibilidad de hacer coparticipable el impuesto PAIS, se generó una tensión con las provincias que aún no afloja.
Fuentes parlamentarias confirmaron que los gobernadores mantienen la postura firme de reclamar la coparticipación del impuesto PAIS. Puntualmente piden el 21 % del gravamen que se cobra la compra de dólares y que actualmente va al Registro Nacional de Barrios Populares en Proceso de Integración Urbana (RENABAP), que se quedaría con un 9 o 7 %.
Ese es el plan A de los gobernadores mientras que el plan B sería meter mano en el Fondo de Garantía de Sustentabilidad con un compromiso firmado del Gobierno de avanzar hacia un pacto fiscal después de que la ley sea aprobada por el Congreso.
No obstante, hay diputados de Hacemos Coalición Federal que presionan para bajar el pedido de coparticipación del impuesto PAIS, luego de que Francos anticipara que el Gobierno anticipara que si se aprueba será vetado por el Presidente.
«Vamos a ir a un esquema de una Argentina verdaderamente federal. Y eso va más allá de la discusión parlamentaria de impuesto PAÍS si o impuesto PAÍS no. Eso es un pacto fiscal en el que tenemos que trabajar una vez que el Gobierno logre esta ley que tanto necesita. Estamos dispuestos a acompañar y queremos que el gobierno llegue a su meta de equilibrio fiscal. En la Provincia de Chubut necesitamos que la macroeconomía se ordene», dijo Torres.
Reunión de la UCR
Paralelamente, este lunes hubo una reunión por zoom del bloque radical para analizar artículo por artículo. Las posiciones en la bancada que comanda Rodrigo De Loredo no se modificaron. La atención, en realidad, está puesta en lo que surja en un posible contacto del Gobierno con los gobernadores de Juntos por el Cambio y los peronistas no K.
Aunque entre los radicales aún hay ciertas diferencias porque algunos diputados anticiparon que votarán en contra de la delegación de facultades extraordinarias, más aún cuando el oficialismo mantiene demorada la conformación de la comisión bicameral de Trámite Legislativo, que debe determinar la legalidad del Decreto de Necesidad y Urgencia (DNU) que firmó Milei.
Así lo anticipó a este diario el formoseño Fernando Carbajal. «La misma comisión que controla los DNU tiene que controlar cómo el Ejecutivo ejerce las facultades delegadas. ¿Cómo vamos a votar para delegar facultades cuando el Presidente de la Cámara se niega a cumplir la ley y constituir la comisión?», protestó el diputado radical.
Facundo Manes votó en contra de la ley. Foto: Twitter.A esto se agrega que Facundo Manes estuvo ausente en la reunión por zoom. El neurocirujano votó en contra en la general al igual que Pablo Juliano y ya se menciona que el número de radicales que rechazan los artículos neurálgicos de la ley podría aumentar. Eso se terminará de cocinar este martes cuando este grupo de radicales se reúna antes del reinicio de la sesión.
Entre los temas que aún siguen generando tensión entre el oficialismo y la oposición están las privatizaciones. Para los dialoguistas hubo una mejora en la redacción del capítulo al permitir la votación en 4 artículos y 4 anexos. Sin embargo, tal como informó este diario, piden mayor transparencia en el proceso de licitación y otorga más poder a la comisión bicameral que controlará el proceso.
Otro de los capítulos que sigue levantando temperatura está relacionado con la toma deuda. Es que en la Ley Ómnibus se incluyó un artículo que elimina condiciones fijadas en la denominada Ley Guzmán que limitaba la emisión de bonos en moneda extranjera por encima de los establecido en la Ley de Presupuesto.Es que superado ese porcentaje, el Ejecutivo debe mandar una ley especial al Congreso para tomar deuda.
A esto se agrega la preocupación de la oposición por la reestructuración de deuda en default. En un principio hubo un acuerdo para modificar el artículo, pero al final fue rechazado por el Gobierno y mantiene su postura de no pedir autorización al Congreso, lo que también tensó la relación con la oposición. A tal punto se complicó la situación que la oposición dialoguista le dijo al oficialismo que redacte los artículos que están pendientes, pero ya anticiparon que si no se ajusta a lo pedido terminarán imponiendo su propia redacción.
Se mantienen las diferencias por la modificación de la Ley de Glaciares, el capítulo vinculado con la cultura y crecen las posibilidades de que se rechace la ley de Seguridad, ya que genera resistencia la desproporción por el aumento de las penas a la organización y participación en movilizaciones. Tampoco conforma la redacción de los artículos referidos a la Legítima Defensa y Resistencia a la Autoridad. La ministra Patricia Bullrich trabajaba para mejorar la redacción con intención de obtener la aprobación del Congreso.